Se pregunta elEconomista.es --como cuestión retórica, supongo-- por lo que se esconde tras el "milagro" alemán. Y el propio periódico se contesta que: "Menos salarios y más desigualdad", siguiendo con la afirmación de que 4 de cada 5 alemanes no ha mejorado en nada sus condiciones de vida a pesar del crecimiento.
Lo llaman milagro pero todos sabemos lo que ha pasado: de hecho, lo mismo que predican. Hace tiempo (décadas) que la "trickle down economics" viene funcionando. Ya saben, los ricos deben hacerse muy ricos para que las migajas caigan de su repleta mesa y puedan aprovechar a los pobres --que somos cada vez más: no es ninguna hiperbóle que la pobreza amenaza, de forma descarada o más o menos sutil, a la inmensa mayoría de las personas. Y mientras, todos sabemos que sin políticas distributivas enérgicas que pongan coto al acaparamiento la abundancia de la mesa de los muy ricos, la distribución, si la hay, dependerá de la caridad (al estilo Bill Gates y los 40 magníficos mientras retrocedemos decenios y decenios en las políticas de ciudadanía y en un Estado del Bienestar basado en derechos.
La filantropía de Gates y el "crecimiento" de Alemania que han asombrado al mundo este mes de agosto proceden de la misma matriz, y dan asco y miedo (ni siquiera las bajísimas tasas de paro de Alemania comparadas con las de España permiten un cierto respiro).
La fortuna hecha por un monopolio excluyente como Microsoft combinada con el supuesto que se pretende mantener en la competencia tan blasonada por la economía establecida para salir de la crisis y recuperar equilibrios, abofetea la inteligencia. Y los sacrificios no sólo trabajadores y trabajadoras alemanes, sino de toda Europa --españoles y griegos en primera línea-- con sueldos y salarios menguantes mientras se incrementan sus deudas y la dificultad de pagar sus hipotecas merecen, comom mínimo, que Europa se levante en una huelga compartida el 29S.
Porque da tanta rabia como desazón que la precariedad que nos imponen impida ofrecer un mundo mejor a los jóvenes... Por lo menos, tan malo o tan bueno como el que nosotros vivimos... Pero esta hipótesis no se contempla en la supuesta salida de la crisis que las políticas neoliberales proclaman y que el "milagro alemán" ya hace explícita. Según The Wall Street Journal.
"Los números apuntan a que el 20% de los alemanes trabaja en sectores con salarios bajos, definidos como aquellos en los que se gana menos de 9 euros la hora. Además, casi el 33% de las ofertas laborales son temporales y mal pagadas."
Ésta es la supuesta salida de la crisis que las políticas neoliberales proclaman. En definitiva, no hay milagro alemán. Lo que hay es salarios más bajos y más desigualdad... sólo por lo que a salarios se refiere, podemos leer en elEconomista.es que en el 2004 el salario medio en Alemania era de 16.471 euros anuales, y el año pasado se quedó en 15.815 euros.
Y más números: entre 1998 y 2008, el número de trabajadores que gana menos de dos tercios del salario medio se ha incrementado en 2,3 millones de personas hasta los 6,55 millones, según un estudio reciente de la Universidad de Duisburg-Essen.
Y unos datos finales: según la OCDE el porcentaje de trabajadores con salarios bajos se incrementó del 16% en 1998 al 21,5% en 2008. En EEUU, este "sector" aglutina al 24,5% de los empleados, en el Reino Unido al 21,2% y la media dentro de la OCDE es del 16%.
Herwig Immervol, economista de la OCDE, es muy claro. "Hemos visto una expansión de trabajos con salarios bajos desde finales de los 90". "Hay un incremento de la desigualdad en Alemania. Lo hemos visto en otros países, pero en ningún sitio como en Alemania", concluye en declaraciones al Journal.
¿Y cuál es el "bondadoso" paliativo a la crisis? Caridad de los magnates y ayudas del Gobierno, que en Alemania han llegado a superar los 50.000 millones desde 2005 en ayudas a las personas que no llegaban a fin de mes.
Fuente de la noticia: elEconomista.es