No todo el veneno que destiló el atentado contra las Torres Gemelas del 11 de septiembre de 2001 ha quedado reducido a la esperpéntica imagen de un predicador rodeado de cámaras que amenaza con quemar libros del Corán para extender por todo el mundo el temor y el miedo... Esta ponzoña forma ya parte de las campañas permanentes de terror que pretender transmutar ciudadanía en vasallaje, haciéndonos moldeables y dóciles, si nos descuidamos, ante leyes no deseadas ni deseables.... y ni siquiera sentir náuseas (sólo un inmenso hastío) ante las repetidas y cansinas mentiras de aquellos en los que alguna vez se confió...

Sin embargo, hay otras falsedades que adquieren dimensiones dramáticas. Por ejemplo, los intentos de justificación del magnicidio de Chile. Y no sólo por la dramática pérdida de Salvador Allende, de Victor Jara y de tantos y tantas mujeres y hombres muertos, exiliados, desaparecidos, que eran y son lo mejor de su país, por el asesinato de la libertad y de la voluntad popular... sino porque las sucias manos de quienes siguen ahora dominando los escurridizos hilos de la economía globalizada fueron las inductoras del golpe asesino.

No exagero: Las continuas imposiciones económicas del FMI y demás organismos "supranacionales" que los dirigentes de todo el mundo acatan, son una renovada, continua y repugnante justificación del golpe de Estado de Pinochet del 11/S de 1973 en Chile. Y de los duraderos efectos de ese veneno sí hay que temer, con motivos, por nosotros y nuestra menguada democracia, pero sobre todo por las nuevas esperanzas que se alumbran en otros países de América Latina.

Y luego está este otro veneno real que envenena los cuerpos sin remedio en un mundo que considera la salud como una mercancía y que se desencadenó en Nueva York, en el 11/S del 2001, en un atentado del que las mentiras oficiales dicen que significó la muerte de tres mil personas. Como podemos ver hoy en un Documento fundamental, semanas, meses y años después han ido apareciendo las gravísimas secuelas para la salud de las personas que estuvieron en la Zona Cero el mismo día del atentado y días sucesivos.

Se trata de un veneno detectado y que deja dolorosas y profundas huellas. Afecta a un gran número de miembros de los equipos de rescate que padecen diversas enfermedades, muchas de ellas muy graves, a causa del aire tóxico que respiraron. Y, sin embargo, a pesar de su evidencia, no se le quiere reconocer, aunque quizá la investigación sobre los efectos continuados de esos tóxicos pudiera ayudar en la investigación de tantas enfermedades "emergentes" incomprendidas (o que no se quieren comprender) en todo el mundo...

Como comentario al reportaje que se emitirá esta noche en la 2 de TVe, podemos leer en su página web del programa Documentos, que "la mayoría de los enfermos forma parte de los servicios de emergencia, los que llegaron a prestar los primeros auxilios y después participaron en las tareas de demolición y limpieza. Durante horas y días estuvieron respirando un humo tóxico cargado de todo tipo de componentes, muchos de ellos cancerígenos. Curiosamente, ante el pánico general, la Administración intentó tranquilizar a la población diciendo que aquél humo negro e inquietante no era peligroso.

La sucesión de casos, incluso algunas autopsias practicadas, confirmaron lo contrario. Muchas de las 40.000 personas que trabajaron en aquellas semanas en el World Trade Center fueron cayendo enfermas y muriendo. Y la lista va en aumento.

'11-S, un asunto envenenado' ofrece testimonios estremecedores de protagonistas recordando que en los trabajos que realizaron nunca encontraron ordenadores, teléfonos, muebles,'todo estaba pulverizado', y ese polvo era lo que estaban respirando. También los médicos explican las terribles e indiscutibles consecuencias de aquella inhalación, cuyos efectos pueden seguir apareciendo hasta cuarenta años después.

Por si la situación fuese poco dramática, se da la circunstancia de que son muchos los enfermos del 11-S que se han quedado sin seguro médico y han caído prácticamente en la indigencia. Se reúnen y reclaman a las autoridades una respuesta como la que ellos dieron en el primer momento de la crisis. Sin embargo, según los afectados, la prioridad de la Administración ha sido, desde el principio, recuperar la normalidad económica en la zona, por encima de la salud de sus ciudadanos."

Si les interesa el tema, pueden ver 11-S, UN ASUNTO ENVENADO, este sábado, 11 de septiembre del 2010, a las 22:30 por La 2 de TVE.

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