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¿HAY COSTRA EN LA INTERNACIONAL SOCIALISTA?
El Negociado de afiliaciones de la Internacional Socialista ha dado de baja fulminantemente de su organización a los partidos políticos que presidía el tunecino Ben Alí y al que, todavía, dirige ese pinta de Mubarak. Desconocemos los estatutos de la Internacional Socialista, de manera que no estamos en condiciones de saber hasta qué punto se trata de una decisión autoritaria o, por el contrario, es el resultado de un sosegado debate en el seno del grupo dirigente de la Internacional. Naturalmente, las expulsiones se han tomado sin discusión alguna: de haberse debatido habría salido a la luz pública por qué se ha tardado tanto en aguantarlos en la casa. Por supuesto, esa costra de Alí y Mubarak están mejor fuera que dentro de la IS. Pero ello no es óbice para que nos hagamos algunas preguntas.
¿Qué vio en su día el Negociado de afiliaciones para dar de alta en la IS a esa pareja? Digamos que vieron maneras. Ahora bien, cuando la tarde languidecía y renacían las sombras –esto es, cuando la Costra empezó a hacer de las suyas-- ¿por qué el Negociado de la Internacional mantenía en su regazo a Ben Alí y Mubarak? Lo siento: me cuesta trabajo creer que Raimon Obiols no estuviera incómodo con la presencia de esos “compañeros”. Así, entre nosotros, no creo que la Sociedad Fabiana en sus buenos tiempos hubiera tolerado esa costra en su mesa camilla.
Oído cocina, ¿hay más costra en la Internacional Socialista? Ahora mismo me voy al estanco de la esquina a comprar papel de barba y una póliza, que dirigiré al Negociado de afiliaciones de la IS solicitando que revisen si hay que expulsar a otras costras adyacentes.
¿Qué vio en su día el Negociado de afiliaciones para dar de alta en la IS a esa pareja? Digamos que vieron maneras. Ahora bien, cuando la tarde languidecía y renacían las sombras –esto es, cuando la Costra empezó a hacer de las suyas-- ¿por qué el Negociado de la Internacional mantenía en su regazo a Ben Alí y Mubarak? Lo siento: me cuesta trabajo creer que Raimon Obiols no estuviera incómodo con la presencia de esos “compañeros”. Así, entre nosotros, no creo que la Sociedad Fabiana en sus buenos tiempos hubiera tolerado esa costra en su mesa camilla.
Oído cocina, ¿hay más costra en la Internacional Socialista? Ahora mismo me voy al estanco de la esquina a comprar papel de barba y una póliza, que dirigiré al Negociado de afiliaciones de la IS solicitando que revisen si hay que expulsar a otras costras adyacentes.
Radio Parapanda. Vean, vean LOS EMPRESARIOS COMPLEJOS, UN RETO PARA EL DERECHO DEL TRABAJO
Font:
José Luis López Bulla
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