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Àngels Martínez i Castells. Willy Toledo: hay razones para la rebeldía
Àngels Martínez i Castells.

He recibido un comunicado de la asamblea de Alpedrete en el que cuentan que el pasado jueves estaba prevista la presentación del libro de Willie Toledo “Razones para la rebeldía” en el bar La Marmita de Alpedrete. Una hora y media antes del acto empezaron a congregarse ante el local algunos neonazis con actitud agresiva. En los días anteriores habían puesto pegatinas en el local y mandado mensajes amenazadores por twitter. Ante la situación, se corrió el mensaje entre los activistas del pueblo y de otros cercanos, y acudió mucha gente, bastantes militantes de IU de Alpedrete y Villalba y participantes en la Asamblea 15M local. Minutos antes del comienzo del acto, unos 35 o 40 neonazis trataban de impedir el paso al local, portando una pancarta y profiriendo cánticos y amenazas. En el local se congregaban unas 80 personas. Había tanto guardia civil como policía local.

Cuando llegó Willie Toledo, al que hubo que ir a recoger a la entrada del pueblo para protegerle, hubo momentos de gran tensión. Algunos de los asistentes bajamos a la calle (La Marmita está en un local elevado) para hacerle pasillo a Willie y los nazis empezaron a insultarnos y amenazarnos, a decir lindezas como que nos iban a matar y que iban a poner una bomba en el local, etc. La policía no hizo nada. Algunos de los asistentes se enfrentaron verbalmente a los nazis, quienes redoblaron sus gritos histéricos y amenazas salvajes.

El acto se desarrolló de manera distendida y con buen humor, con la Marmita llena a rebosar. Al cabo de un cierto tiempo los nazis se disolvieron.  Willie Toledo alucinaba. En sus más de 20 presentaciones nunca le había ocurrido algo igual. Le expliqué lo que es vivir en un pueblo con tanto nazi apoyado por el Ayuntamiento. Alucinaba con la España profunda.

Me parece increíble que la policía permita la agresión a un@s ciudadan@s que se habían reunido para presentar un libro. ¿Os imagináis que 30 personas nos ponemos a la puerta de un cine o del Carrefour a amenazar e insultar a los que pasan? Nos detienen seguro, y con razón. ¿Y por qué a estos no? Así se lo dijeron algunos a la policía cuando se hubieron ido los nazis. La policía pidió la documentación a los que les pedían explicaciones. A los nazis, que sepamos, no.

Algun@s participantes en el 15M vamos a estudiar una denuncia contra la actuación policial. Allí mismo hablamos participantes del 15M y movimientos sociales con gente de IU y decididimos convocar un acto de repulsa el sábado 17 de diciembre, convocatoria que esperamos consensuar en la asamblea de este domingo. Ojalá nos apoyéis. Tras la victoria del PP, los nazis están crecidos. No podemos tolerarlo.Resultó un acto muy acogedor, puede que, además de por el contenido de lo que se dijo, del personaje, de los anfitriones (la familia Rabal), también por el frío que hacía fuera. No frío de nieve, todavía, sino frío violento por unos cuarenta neo nazis que amenazaban con atacar a Willie por ser un proetarra, y que la policía local, y sobre todo la guardia Civil, tuvieron que contener.

Mientras fuera se gritaba pidiendo cámaras de gas y se amenazaba de muerte a gentes de Izquierda Unida, concejales o ex concejales, que esperaban con tensión a que el odio desapareciera o hacían un pasillo protector al protagonista de la noche, dentro se hablaba de paz, de libertad, del imperialismo que todo lo determina, de las condiciones de vida de otros pueblos, de nuestros gobernantes, etc.

Tambien Victor Claudín lo explica del siguiente modo: Willie es un tipo que piensa, que razona, que tiene unas convicciones firmes, que clama por atajar las raíces de los problemas, que tiene una visión nítida de lo que sucede en el mundo y por qué está lleno de injusticias, de guerras que sólo sirven a los mismos todopoderosos de siempre, y un tipo que, por todo ello, ha tomado partido, se ha comprometido hasta el cuello. Y también es un gran actor.

Todo eso lo demostró según explicaba lo que dice en su libro, con aire simpático, humorístico incluso, desgarrados a veces.

“Dicen que voy contra todo en este libro, pero en realidad es una carta de amor a mis compañeros de profesión”. Recordó aquella ceremonia de los Goya, ideologizada por la guerra de Irak, a partir de la cual se criminalizó a la profesión. Y que luego, nada, ni siquiera tuvieron la misma actitud en la siguiente contienda de idénticas características.

Luego, “nos resistimos a que el cine sea un producto comercial más, pero esta batalla también la estamos perdiendo”. Explicó el poder que tienen las televisiones en la creación cinematográfica. Partiendo de que Berlusconi posee el 55% de total televisión, y teniendo en cuenta la programación de la pequeña pantalla, se está llegando a un punto en que son ellos los que deciden qué películas se hacen.

Hablando más de la profesión subrayó que cerca del 75% de los actores y de las actrices están en el paro, que no hay continuidad en el trabajo, despidos gratuitos.

Al hablar de lo que cuenta en el libro se refirió a anécdotas en relación a tres ministras: Trini, Chacón y Sinde. La primera en ser “despellejada” fue la Sinde y su Ley, que se aprueba ahora, y que siendo “un instrumento para continuar reduciendo el acceso de la gente a la cultura”. Una Ley al servicio de otros poderosos… y aquí entró la SGAE, sometida al bisturí despellejador de Toledo.

Luego le tocó el turno a la Trini, relacionada con el fabuloso negocio que hizo Rumsfeld con el Tamiflú, estando ella recién nombrada ministra de sanidad, tras una de las reuniones a las que asiste como miembro de la Trilateral y del Club Bilderberg, a los que el político militarista norteamericano también pertenece y donde se debió esbozar el montaje super comercial de la gripe A. 14 millones de dosis compró Trinidad Jiménez para una enfermedad que tenía “·menos mortalidad que el esguince de rodilla”.

De la que calificó de “ministra de la guerra, Carmen Chacón relató su cita, porque ella le llamó para verse tras unas declaraciones que el actor hizo en la revista Época diciendo que lo de Afganistán era lo mismo que Irak y que si la ministra creía que todos los españoles eran gilipollas. La cita no se llegó a consumar.

También hubo momentos tiernos, cuando una mujer presente recordó al padre de Willie, doctor Toledo que en aquel Primero de Mayo del 73 estaba a disposición de los heridos que pudieran llegar de las manifestaciones, para no dar parte d las autoridades, como así se exigían. Intervención que dio pie al actor comprometido a asegurar que “la persona que me he hecho le debe mucho a mis padres”, contando el ambiente de discusión política de su casa, los poster revolucionarios que llenaban las paredes, etc.

A propósito de una pregunta del público, tuvo oportunidad de recordar la lucha del Frente Polisario, de contar las condiciones de vida, tanto en los territorios ocupados como en los campamentos. Y anunció que a finales de este mes de diciembre llega un momento clava para los saharauis, con un Congreso del Frente Policario en el que se encontrarán dos posturas, dirigentes históricos que llevan demasiado tiempos instalados en el poder y los jóvenes que claman contra el inmovilismo y contra la confianza que sus mayores mantienen hacia eso que llaman la Comunidad Internacional.

Como alguien también dijo al final, el acto había sido un triunfo de la Democracia, porque en lugar de renunciar a él por culpa de la amenaza del frío neo nazi exterior, se había incrementado la presencia prevista al acto. Un acto de sentimientos, argumentos, palabras, eso es lo que se impuso al odio y la sinrazón de los jóvenes de fuera.

Lo cuenta también Carlitos Buenaventura


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