Hans Kelsen
Caballeros:
Quisieraque ustedes despejaran una curiosidad que tengo. ¿Por qué el juicio de lasescuchas contra don Baltasar Garzón ha sido el primero, pese a que no lo fue enla instrucción?
Caballeros:He oído en ciertos círculos, bien informados en la materia, el por qué de estaestrategia que, de manera fundamentada, atribuyen a Federico Trillo. Reza así. Sicontrolo la Sala Penal del TS, la estrategia es clara: primero, condeno a Garzón por las escuchas, con lo que en buena parte,siembro de dudas a la ciudadanía sobre mi corrupción. Luego, absuelvo a Garzónpor el tema del franquismo, a la semana siguiente. Y lo de los cursos, ya severá. Al final: lo que puedo vender a laciudadanía es claro: eso de la corrupción fue un montaje pero en el tema delfranquismo se le ha absuelto. El Estado de Derecho funciona y yo me voy más omenos limpio y con las manos limpias. Repito (seguiría diciendo eseTrillo): para eso preciso que una buena parte de losmagistrados del TS me sigan en esa estrategia (y en ello va el batiburrillo deconmilitones de la caverna y los amigos de Margarita y Leguina, ansiosos de pasar facturapor el GAL). Y, lamentablemente, así ha sido. Creo que no ocioso remarcar cómoel juicio de las escuchas ha ido primero, pese a que no lo fue en lainstrucción. (Y claro que no acabo de controlar a los magistrados del TS: iguallo acaban condenando por lo del franquismo, pero en ese caso, miel sobrehojuelas).
¿Estoyerrado, caballeros?. Ya saben ustedesque el diablo sabe más por viejo que por diablo, y este es mi caso. Cosa queaprendí leyendo a Kelsen: "la justicia es irracional y emotiva". Aunque apuestoque ustedes han hecho una lectura torticera, a sabiendas y queriendas, de lo que quería decir --y dejó enseñado-- el ilustre juristavienés.
