Hoy la Comisión Europea ha dado un primer ZAS, en toda la boca, al don Tancredo Rajoy que mintió (de nuevo) en el debate sobre el estado de la nación. Esta euforia de vino malo ppero ha durado lo que tarda en saberse que Bárcenas tiene sometidos a los jerifaltes de la gaviota por donde más duele, y ante notario. Hoy, además, Bruselas retrasa la recuperación de la economía española, y prevé que el PIB continúe con pulso débil, que el paro siga escalando y que el déficit aparezca sin control… en este escenario, y contra lo que el Presidente de manguitos dijo a espaldas de la población, la tasa de paro puede alcanzar el 27% de la población activa (a pesar de que las mujeres y hombres más preparados siguen engrosando la emigración…)
Mañana seremos la ciudadanía, transmutadas en mareas, en toda España, las que podemos dar la respuesta que troleros y mentirosos, corruptos y represores, se merecen. Mañana, por primera vez, todas las mareas, movimientos, sindicatos y colectivos que han salido a la calle estos años confluirán en una movilización histórica “contra los recortes y por la democracia”, por la justicia social y para acabar de una vez por todas con las políticas de austeridad (las que justifican la gran ESTAFA contra el 99%) y denunciar la deuda ilegítima, los golpes financieros, la privatización de los servicios públicos y la corrupción que significa paro, desahucios, precariedad, y un incremento de las desigualdades hasta muy cerca del punto de no-retorno.
Desde la UE le han dicho hoy a Rajoy que tiene que hacer más recortes para cumplir el tótem absurdo de un déficit público contra toda lógica- Desde la UE quieren decidir nuestro futuro con imposiciones ideológicas que cuestan dolor y vidas,,,, Pero las mareas tendrán mañana la palabra, y estoy muy de acuerdo con lo que escribe hoy Arturo Gónzalez: el futuro de España se decide mañana: Y continúa ” Dirán ustedes que es una exageración, pero sí, el destino y futuro de España se decide mañana, llueva o nieve, con el éxito o fracaso de las manifestaciones convocadas.
Mañana se decide si de verdad queremos cambios o solo los queremos de boquilla. Se decide si somos unos zánganos sociales, si en el fondo estamos conformes con esto, si queremos que nos lo den todo hecho por nuestra comodidad, si realmente los seis millones de parados existen, si nueve millones de pensionistas quejumbrosos y con razón son algo más que yayoflautas ocasionales.
Mañana se celebra el Gran Debate sobre el Estado de la Ciudadanía, el debate sobre si queremos ser libres y responsables, se decide si queremos afrontar la lucha en común o con lucha de clases apaleadas pero discrepantes entre ellas. Si médicos, maestros y funcionarios todos, enfermos, alumnos, universitarios, inmigrantes que venzan el miedo, jóvenes a punto de emigrar, quinceemes, frentecívicos, ecologistas, y hasta desencantados de la derecha, celebran corales reuniones y callejeras reclamaciones.
Se decide y zanja si es una frase gastada y carente de contenido el ‘El pueblo unido, jamás será vencido’. Se decide si también hay economía sumergida y fraude en la reclamación de derechos y nos escaqueamos. Si de verdad nos preocupa el futuro y el de nuestros hijos. Si era, es, cierto lo de Lucha toka, si legitimamos que la democracia solo sea echar un papel en una urna cada cuatro años. Mañana, nieve o llueva, se decide si nos merecemos estos políticos de los que renegamos. Si queremos un proceso constituyente que dé paso a lo que queramos. Si queremos que retiren la reforma laboral que nos humilla. Que la riqueza se reparta un poquitín mejor. Si nos da miedo la policía. Si abstencionistas, anarquistas y libertarios son la solución. Si enclaustrados marxistas se unen a la realidad de la vida. Si somos capaces de no expulsar a nadie. Si somos más o menos que ellos, los poderosos y secuaces. Si queremos los privilegios del clero. Si en España existe libertad. Si de verdad queremos luchar contra la corrupción o es que solo nos divierte que exista. Si tenemos conciencia crítica o el desánimo nos vence. Si la teoría vence a la práctica. Si somos capaces de nuestra Diada nacional.
Ánimo, vayamos, llueva o nieve. Mañana decidimos nuestro futuro.”