Esto es, cómo meterle el diente a ese proyecto, siempre permanente y siempre inacabado, de la «refundación del sindicato»; de qué manera reformar toda la anatomía de las izquierdas; cómo articular una relación entre los movimientos sociales y las izquierdas, basada en la igualdad y en la diversidad de esos sujetos; de qué manera construir un proyecto de sociedad activa e inteligente. Como es de cajón, todavía estaba meditando sobre la «refundación del sindicato» cuando llegamos al final de la manifestación. Pero volviendo a casa me dije: es sobre estos procesos donde cabe la hipótesis de construir ese país extraño.
QueridoSísifo, ya lo sabes: otra vez te toca subir la cuesta. Te envidio porque cada vez que bajas, te vuelves a levantar.