Un grupo de personas expertas en temas fiscales convocadas por ATTAC, han redactado un llamamiento urgente sobre la nueva propuesta de Montoro con el título: “Ante la reforma fiscal que prepara el gobierno:llamamiento urgente“.
En el mismo -cuya lectura atenta les recomiendo- se afirma que “la única vía para la justicia social y para un desarrollo económico sostenible es un sistema de bienestar basado en impuestos progresivos generalizados y servicios públicos universales. Esta es la única base posible para construir un modelo que haga realidad el derecho a una vida plena en condiciones de equidad para todas las personas.”
Sobre las intenciones del Comité de Expertos que asesoró al Gobierno, y sobre las intenciones de Montoro y su equipo, dicen también que “encima de los argumentos supuestamente técnicos, todas estas operaciones (fiscales) tienen una intención y unos efectos muy claros. En primer lugar, que las rentas altas y los grandes capitales paguen cada vez menos impuestos. Hasta las rebajas generalizadas del IRPF son más importantes para las rentas altas. En segundo lugar, según se recortan las prestaciones y los servicios públicos aumenta el negocio de los servicios privados. Este negocio está potenciado por las privatizaciones de los servicios públicos, pero también, y muy importante, por los recortes sociales y la falta de atención a las necesidades básicas de la población. Por ejemplo, a la vez que se rebajan las pensiones y se paraliza la creación de sistemas públicos de atención a la dependencia, avanzan los planes de pensiones y los seguros de dependencia privados, que aún son incipientes en nuestro país.”
Por todo ello se deduce de la propuesta fiscal que nos preparan una menor equidad de género y de clase, al tiempo que una mayor distancia o alejamiento de los posibles escenarios de recuperación y reducción de las desigualdades.
De forma más leve pero igualmente acertada e incisiva, la mirada mañanera de Soledad Gallego-Díaz en La Ser se ha centrado hoy en la presión fiscal española, seis puntos por debajo de la media comunitaria. Tambien la periodista, como los expertos y expertas de ATTAC, nos brinda sus razones para desconfiar del lance fiscal que el próximo viernes Montoro nos ofrecerá en estos ruedos neoliberales y suicidas del PP, y donde lo fundamental de su “faena” de reforma de los impuestos directos supone también, ¡y naturalmente! menores aportaciones en fiscalidad para los más ricos y poderosos.
En opinión de Soledad: “Las estadísticas europeas siempre dan sorpresas. Ayer se hizo pública una relativa a la presión fiscal en los países de la Unión Europea. Según esa estadística, sumados los impuestos y las contribuciones sociales obligatorias, la media de la presión fiscal en Europa es del 39.1% del Producto Interior Bruto. Los datos españoles son muy curiosos: no alcanzamos esa media ni por casualidad. La presión fiscal en España se sitúa en el 32,5% del PIB, una cifra verdaderamente baja. Estamos seis puntos y medio por debajo de la media europea, pero es que si se compara con los países próximos al nuestro, como Italia o Francia, entonces la diferencia es abismal: más de once puntos por debajo.
La estadística europea incluye una curiosa comparación entre la presión fiscal de 2012 y la de 2002. En prácticamente todos los países europeos de la zona euro esa presión fiscal ha subido, menos, de nuevo, en España, donde es un punto y medio más baja que hace diez años.
En la mayoría de los países con democracias avanzadas la solidaridad se mide en impuestos y contribuciones sociales obligatorias, no en aportaciones voluntarias a bancos de alimentos. Por alguna razón que no se comprende, el ministro Montoro ha anunciado otra vez que va a bajar los impuestos. ¿Realmente el Estado español tiene muchas menos necesidades que financiar que el alemán, el francés, el italiano o el británico?”
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Ver también: Desigualdad, el puente a la barbarie