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PROGRESO MUNICIPAL CONTRA LOS RECORTES SOCIALES

Las elecciones del 22 de mayo deben servir para valorar el trabajo en el mundo local y las convicciones municipalistas de cada opción política. El PSC afronta estas próximas elecciones con el bagaje de más de 30 años de experiencia de gestión contrastada en los municipios donde hemos gobernado. Como decía el president Montilla no hace mucho, si hay un partido con vocación municipal, con ADN municipal, éste es el PSC. El cambio en los pueblos y ciudades en los que viven la mayoría de los ciudadanos y ciudadanas de Catalunya, el progreso, los avances, han venido principalmente de la mano de los centenares de hombres y mujeres socialistas y progresistas que han dedicado su vocación pública al servicio directo de sus conciudadanos, de sus vecinos y vecinas.

CiU se presenta a estas elecciones como si fuesen una especie de reválida de las pasadas autonómicas, como si les fueran a servir para reafirmar su liderazgo obteniendo así un cheque en blanco a su política de recortes sociales. El PP se presenta como si fuesen unas primarias de las elecciones generales del 2012, una pista de pruebas para dar un volantazo a la derecha y llevar a Rajoy a la Moncloa.

Pero estas elecciones locales no son ni una segunda vuelta de lo que ya ha pasado ni una primera vuelta de lo que haya de venir. CiU debería preocuparse más de gobernar bien cumpliendo el mandato ciudadano, y el PP debería renunciar a hacer de los municipios el banco de pruebas de mensajes populistas que generan tensión y frustración, manipulando cuestiones relativas a la seguridad y a la inmigración.

El 22 de mayo se votan personas. Se votan vecinos y vecinas. Votaremos la gestión realizada los últimos cuatro años. Los pueblos y ciudades tienen ante sí la oportunidad de juzgar quién ha trabajado más y mejor para defender sus intereses. Por eso, quienes planteen las elecciones en una clave que no sea la estrictamente local pretenden engañar a los ciudadanos.

El PSC presenta una hoja de servicios inequívocamente municipal. Y nuestra campaña se centrará en los problemas de los ciudadanos. Los municipios, vista la orientación antisocial del nuevo gobierno de CiU, han de erigirse como el primer bastión contra los recortes y en defensa del mantenimiento de los servicios públicos y las políticas sociales. No podemos permitirnos retroceder en el Estado del Bienestar del que los Ayuntamientos son la primera línea de defensa. Los gobiernos locales deben asegurar que nuestros pueblos y ciudades sean cada vez mejores espacios de convivencia, de oportunidades y de solidaridad, por eso nuestras candidaturas llevan el lema «Progrés municipal». Así, las municipales deben servir también para desautorizar la política de recortes sociales del gobierno presidido por Artur Mas, y para reforzar el proyecto progresista de unidad civil y cohesión social que lideramos los socialistas y que sumará nuevas energías en cada pueblo y ciudad.