Asisto al acto final de campaña en L’Hospitalet de Llobregat. Me reencuentro con viejos amigos y compañeros de la agrupación del PSUC, de la que fui responsable de 1979 a 2003. Las charlas con ellos me hacen más soportable un mitin que, aunque interesante, tiene demasiados oradores para mi gusto. Una gran asistencia de público, y muy entregado. Espero que tanto seguimiento electoral se transforme en votos el próximo domingo 27-S.