Mezclar. Entrar. Salir. Circular. Intercambiar. Fluir.
Y sobre todo, abrir.

Abrir el socialismo a las personas. Sin exigir compromisos eternos. Recoger la voz crítica, como una oportunidad para mejorar. Gracias por discrepar. Abrirse a los grupos, a la calle, a las voces, a las ideas. Dejar entrar y sobre todo dejar salir. Visitar las ideas ajenas. Compartir.

Abrir el socialismo a las ideas. Admitir que ya nada es igual, y las viejas ideas sólo sirven para explicar el pasado y no para proyectar el futuro. Inventar nuevas palabras. Preservar lo que es nuclear. Desechar la retórica. Aprender. Escuchar. Y sobre todo, dudar.

Abrir el socialismo al mundo. Construir una izquierda europea, que tenga una voz en el mundo . Dar respuestas locales, pero también globales. Recuperar el valor de la utopía. Levantar puentes. Federar. Acercar las decisiones a los lugares. Cooperar.